jueves, 24 de octubre de 2013

Dormitorio

Por petición de los propietarios, porque están muy orgullosos y felices con su dormitorio, me han pedido que lo incluya en el blog. Y eso me llena de orgullo y felicidad a mí.

Cuando fui a medir el dormitorio me encontré con una habitación de 12,6 m2 rectangular con una ventana de suelo a techo. La puerta del baño no estaba centrada en la pared a pesar de no haber ningún impedimento para ello, es más, la distancia del marco de la puerta a la pared del fondo, que era el único espacio donde se podría ubicar un armario, era de 54 cm. Lo cual les estaba dando muchos problemas para encontrar un armario. Habían comprado una cama con canapé crema, tenían instalado un Split sobre la puerta del baño y dos lámparas de techo.

Necesitaban un cabecero, dos mesillas, un chifonier y sobre todo un armario lo más grande posible, también querían colgar en la pared de enfrente de la cama una televisión plana de 26” que ya tenían.

Les propuse una moldura alrededor del armario para separarlo de la pared y así salvar el marco de la puerta del baño sin tener que recortarlo ni chapucear con él. Con dos puertas correderas colgadas pudimos ponerles un armario de fondo normal de más de dos metros. El armario y el resto de los muebles los fabricó nuestro carpintero de confianza en una melanina muy elegante que casi parece chapa de madera natural.

A demás de los muebles, arreglamos el techo y pintamos toda la habitación, sustituimos un punto de luz por una tira de leds de metro y medio para la zona del armario y el otro que quedaba descentrado sobre la cama lo llevamos sobre una de las mesillas descolgando una lámpara de techo.

Vista frontal de la pared del armario y cabecero

El cabecero lleva integrados los interruptores e iluminación que se enciende independientemente, el lado largo sirve de luz ambiente y el corto de iluminación directa para la mesilla pequeña, como ya supondréis la pequeña es para él y la grande para ella.

Vista del dormitorio con luz natural

En un principio pensamos en pintar la pared del cabecero en un tono visón para combinarlo con la madera en tono crema y el cerezo, pero después optamos por alisarla y colocar un papel pintado con textura que simula la piel de avestruz.

Televisión colgada y radiador visto

Pensaron en colgar la tv sin más, pero con una imagen les mostré cómo les quedaría. Vieron los cables, los enchufes y la tele flotando en el espacio. No les gustó nada, se sorprendieron de lo poco atractivo que les resultaba.

Integración del TV

Les propuse una solución sencilla y elegante para integrar la televisión. Les encantó, es algo en  lo que ni si quiera habían pensado y ahora es lo que más les gusta. Y ya que estábamos, aprovechando la modulación de los cajones de la cómoda hicimos un cubre radiador, que si un día se cansan se puede descolgar, igual que los paneles de la televisión para acceder a los cables.

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